La balanza romana
La romana es un instrumento que sirve para pesar, compuesto de una palanca de brazos muy desiguales, con el fiel sobre el punto de apoyo. El cuerpo que se ha de pesar se coloca en el extremo del brazo menor, y se equilibra con un pilón o peso constante que se hace correr sobre el brazo mayor, donde se halla retrazada la escala.
Partes de una balanza romana
Una romana, o balanza romana, consta de las siguientes partes:
- Dos brazos o astiles, uno mucho más corto. El brazo largo está graduado con marcas.
- Gancho o ganchos para colgarla. Separa ambos brazos.
- Gancho o plato de pesar, en el brazo corto. De él se cuelgan las mercancías.
- Pilón. Es un peso fijo. Se mueve entre las marcas del brazo largo para pesar.
- Registro. Manezuela del pilón para registrar la pesada.
- Bridas formadas por gancho, calamón y horquilla o alcoba.
- Ejes o cuchillas, donde se produce la oscilación.
- Fiel o aguja. Cuando se equilibra el peso de la mercancía y del pilón, su posición es vertical al brazo.
El trabajo de los romaneros
El trabajo de los romaneros es un oficio de precisión. La calidad de una romana está en función de su ajuste y sensibilidad. Las medidas o picas son trazadas sobre una pieza prismática y uniforme llamada vara o brazo largo y se graban con cincel. Tanto las cifras que indican pesos enteros como los fraccionarios, se trazan repartiendo los espacios a compás
La romana se basa en las propiedades de la palanca. El peso de la mercancía se equilibra con el peso del pilón colocado a lo largo de un astil graduado o numerado. Cuando alcanza un equilibrio, el brazo adopta una posición totalmente horizontal y el fiel vertical. El peso se lee en el brazo graduado.
Funcionamiento de la romana
Video explicativo para que entiendas el funcionamiento de la balanza romana.